El Domingo 16 de agosto también estuvo repleto de actividades repartidas a lo largo de la mañana y de la tarde.
Por la mañana la Comisión de Fiestas recibió con un buen desayuno a base de los tradicionales buñuelos, bizcocho y chocolate, de los que dieron cuenta los más madrugadores; sin duda la mejor preparación para lo que venía después: la marcha cicloturista, la competición de petanca y, para rematar y refrescarse un poco después del calor intenso de la mañana, la fiesta de la espuma.
En la marcha cicloturista participaron una treintena de personas que realizaron el recorrido hasta el Mirador de los Barrancos de Gebas, acompañados de dos unidades motorizadas de la Policía Local, miembros de Protección Civil y de Cristina con su Pick-Up escoba (a estas alturas aún no sabemos quién tenía el mayor rango). Vino bien este último efectivo ya que tuvo que realizar alguna recogida de participantes: un peque que no se atrevió a bajar las cuestas con su bici de patines y una niña que sufrió una caída en la que se produjo una pequeña herida sin gravedad en la pierna izquierda, a la altura de la rodilla, aunque terminando el recorrido, también hubo quien no quiso afrontar la última cuesta, paradojas del destino, la que sube a la altura del Cementerio.
Durante este trayecto los participantes contemplaron los bellos paisajes de los Barrancos de Gebas, la cola del embalse de la Rambla de Algeciras y, a la vuelta, el contraste entre estos paisajes áridos y los verdes del Parque Regional de Sierra Espuña.
La Competición de Petanca contó con una muy buena inscripción de deportistas venidos de todas las poblaciones del entorno: Alhama, Mula, El Berro, Fuente Librilla, Librilla, etc. Se celebró en las explanadas cercanas a la Ermita y Salón Social. A media mañana la Comisión de Fiestas preparó un almuerzo en el que no faltó ni los líquidos, ni los sólidos para reponer las fuerzas de los deportistas de cara a las fases finales. Concluyó la jornada para ellos, bien avanzado ya el mediodía, con la entrega de los premios: Jamones, piezas de salchichón y bolas de queso para los primeros clasificados; todo un triunfo para el deporte y para la buena mesa.
Para terminar la mañana, los que quisieron darse un buen remojón y refrescarse de los rigores de este caluroso verano, se lo pasaron en grande con la fiesta de la espuma, después, eso sí, de un pequeño retraso debido a una rotura del cañón lanzadera, que pudo solventarse gracias a la colaboración y pericia de todos los vecinos, unos aportando la lamparilla de soldar y otros una pizca de paciencia.
Al final, sobre las 13.00 h, todos los asistentes pudieron DISFRUTAR de este evento, y fíjense en las mayúsculas, por que realmente fue así: niños y mayores bailando al son de la música y bañándose en una capa de espuma casi a la altura de la cabeza. Era como si hubiera nevado metro ochenta en pleno mes de agosto en el recinto festero.
Como siempre, podéis ver las fotos pinchando en cada enlace.
No hay comentarios:
Publicar un comentario